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diseñados e inspirados
en Menorca

Símbolo del misterio del mar, la medusa representa la vida marina libre y salvaje del Mediterráneo. Flota con elegancia y nos recuerda la belleza frágil de los ecosistemas que rodean Menorca.

Tesoro del Mediterráneo, la posidonia es vida, limpieza y protección. Purifica el agua, da cobijo a miles de especies y cuida las playas. Es símbolo de respeto y conexión profunda con la naturaleza de la isla.

Una palabra que los menorquines hicieron suya, inspirada en el inglés show. XOU es alegría, ganas de vivir, de reír, de compartir. Es la esencia de las fiestas de pueblo, del encuentro con los demás y del alma festiva de Menorca.

Representa cualquier cala o rincón de mar sereno de Menorca. Es la sensación de paz, el agua quieta que acaricia la piel, el sonido suave del oleaje. Simboliza la tranquilidad y el descanso profundo que solo se encuentra en la isla.

Representa la tramontana, ese viento del norte que moldea la isla. Es fuerza, invierno, carácter y movimiento. Muestra el lado más salvaje de Menorca, cuando la naturaleza se expresa con toda su intensidad.

Con solo 360 metros, El Toro es el punto más alto de Menorca y su corazón geográfico. Desde su cima se puede ver toda la isla. Es símbolo de unión, de perspectiva y del alma central de Menorca.

Símbolo de la naturaleza mediterránea, la hoja de pino evoca la conexión con la tierra, el silencio de los bosques, el olor a resina bajo el sol. Es raíz, equilibrio y respeto por el entorno que hace de Menorca un lugar único.

Cuando el sol se esconde, Menorca se tiñe de magia. La puesta de sol es calidez, belleza, despedida suave del día. Es un momento de recogimiento, de paz y de conexión con la esencia acogedora de la isla.

La unión entre la fuerza del mar y la calma que aportan el sol o la luna. Representa el equilibrio entre energía y serenidad, entre el día que despierta y la noche que abraza.